martes, 14 de agosto de 2007

El viaje

Hipnotizado por la banalidad diaria,
veo imágenes que no encuentran lugar en mi cabeza
y quedan condenadas a vagar por mi mirada muerta.
Es un viaje; un momento, lo sé,
pero que extraña trivialidad
me lleva a lo profundo de mis pensamientos.

Me sumergo en mi mundo, mi cueva, mi lugar,
adonde solo yo hablo y las voces de mi conciencia callan,
como el caudaloso río que momentáneamente
se ve detenido por una represa.
En ese momento en el que el mundo grita desenfrenádamente,
por un instante mi cabeza encuentra el silencio.


descubro mi paz y mi tranquilidad...

descanso en ellas...

suspiro...

Se acabó, lugar de destino, de vuelta a la vida real.

17/09/03

lunes, 6 de agosto de 2007

¡Sin compromiso!

El otro día mi papa me contaba que le pidió a un amigo que entrevistara a mi hermana para un trabajo, pero que le había dicho que la entrevistara "sin compromiso".

Supongamos que efectivamente no había compromiso. Pero si lo hubiera habido, ¿Le hubiese dicho "-Entrevistala a mi hija, con compromiso" o algo por el estilo? No lo creo, el punto es que habiendo o no compromiso uno dice, "sin compromiso", entonces esas palabras no tienen valor alguno. Viendolo de esta manera, si es correcto el dicho "piensa mal y acertarás", cuando alguien te dice, "sin compromiso" significa, "con compromiso".
Hay que cuidar las palabras, no usarlas en vano y valorar la sinceridad de nuestro lenguaje. Lo único que se logra diciendo cosas ambivalentes es que se pierda la finalidad de las palabras, la comunicación.

Pase y vea la ropa...¡sin compromiso!