martes, 11 de agosto de 2009

No hubieron mentiras...

Las cosas fueron claras desde un principio, no hubieron mentiras entre los 2, excepto las que yo me dije a mi mismo...
Hablandome lentamente, casi en un suspiro inaudible me prometía cambiar, pero no me uqería escuchar.
No erré en confiar, sino en pensar que no me necesitaba para esto.
Hoy estoy, estoy yo, cada vez mas, y puedo tener una oportunidad mas de las tantas para ser ese que nunca se fue, ese mismo yo de siempre (quién? jajaja)